Color local

De la tribuna al verde césped. Lo que dejó el clásico con Temperley y las estadísticas más importantes. Además, Nico Martínez fue papá primerizo. Felicitades...

Por Pablo García

VIVIR EL CLÁSICO: En la tribuna fue donde hubo clima de partido especial: pintado blanco y rojo, el aliento fue incesante, poniendo calor, color y papel picado para recibir al Milrayitas. También llegaron cargadas al clásico rival cuando un par de gallinas teñidas de celeste se echaron a corretear por el verde césped del Gallardón, que fueron alcanzadas por policías y sacadas de cancha. Sin embargo, el apoyo de la popular no pudo contagiar a nuestros jugadores que crearon poco peligro en el arco de Crivelli -tuvo algunos entredichos con la parcialidad ubicada en la Cabecera Sur-. “Y ya lo ve, y ya lo ve, el que no salta es de Temperley”, cayó con fuerza desde la tribuna Horacio Palacios en el complemento, hasta dejar rojas las gargantas. A eso se sumó una gran cantidad de globos para cambiarle la cara al partido. Pero no hubo caso, apenas un remate del Mecha Rodríguez, un centro bombeado de Darío Ruiz que pegó en el travesaño y una oportunidad del Gordo Avalos cortaron el aliento de los hinchas de Los Andes, creando el “uhhh” generalizado.

EL EMPATE CORTÓ RACHAS: A Germán Corengia se le cortó la seguidilla de victorias, las veces que se hizo cargo del plantel profesional. Había ganado los dos partidos anteriores por 2-1 ante Unión (en Nacional B, tras la renuncia de Quique Hrabina) y Estudiantes de Caseros, la semana pasada. También, la igualdad cortó la racha de dos triunfos al hilo de Temperley frente al Milrayitas cosechados en la temporada 2007/08, ganando 1-0 de local, con gol de Quevedo, y 3-2 en Lomas, con dos tantos de Impallari y otro de Soler, y Tridente y Sardi -penal- para el CALA ¿Cuándo fue la última vez empataron? Justamente fue 0-0 en Lomas, por la Temporada 2005/06, cuando el Gasolero estaba puntero y Los Andes navegaba por los últimos puestos.

¿HUBO ALGÚN DEBUTANTE EN EL MILRAYITAS?: Si, Nico Martínez ayer se convirtió en papá primerizo. Su hijo Lautaro Nicolás nació con 3,50 kg en la Clínica Agüero, de Morón. Sin embargo, hoy el lateral estuvo presente en Lomas cumpliendo con el Milrayitas. Tuvo premio y en el complemento se dio otro gustazo: jugar el clásico tras suplantar a Darío Ruiz. Seguramente el defensor quiso coronarlo con un gol para dedicárselo a su mujer Nadia como regalo del “día del madre”, y a su hijo. No pudo, pero la sonrisa y la alegría no se la quita nadie. ¡Felicidades!

Sábado 17 de Octubre de 2009 | Fútbol Profesional


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